Para dejar atrás las miserias del pasado recorro ese largo pasillo del fondo..aquel que desemboca en tardes de otro perfume por oler, nuevas hojas por esparcir en campos de antiguas primaveras.
Volando entre nubes de algodones que se desgarran con la simple brisa para nuevamente volverse a formar. Siluetas pasajeras, desalojadas con desdén de su creación singular….mares de salvia que brotan para terminar de remendar las heridas de un pasado difícil de pensar. Recuerdos escondidos en recortes de papel, miradas cómplices y sufridas del ayer. Películas de guerra, de amor tal vez, pero solo un desafío que resta por resolver.
Y verás así como yo me marcharé entre recuerdos y olvidos, entre un velo de vapor espeso que casi ya no dejaba ni ver. Abriendo paso intentaste remendar lo hecho sin pensar, pero nunca comprendiste que no era el momento para ver flores renacer.
Calles vacías olvidadas en el ayer, callejones sin salida, desvíos del querer.
Andén abandonado por la cálida tarde de abril, sentimientos despojados de toda dignidad pueril.
Paso a paso, día a día en tierras desiertas, cuasi dormidas, vaciadas de verdad. Realidades utópicas abandonadas en los fondos de la ignominia, respetos perdidos, duelos desgarradores y nada más por hacer.
La perdida suele resultar abrumadora y tendiente a perecer en amaneceres desolados, risueños de furor.